«Personas hogar» son aquellas que nos cobijan como un árbol.
Nos dan luz cuando nos perdemos en la oscuridad de la tristeza.
Nos dan aire cuando la angustia de la vida nos abruma.
Son nuestro apoyo cuando necesitamos consuelo.
Nos hacen sonreír cuando afloran las lágrimas.
Se muestran fuertes para ayudarnos a superar nuestros miedos.
Nos cobijan cuando se presentan adversidades.
Nos acompañan en el camino y echan raíces junto a nosotros
para que nunca estemos solos.
Fotografía y texto de Sara de Miguel.
Dedicado a todas mis «personas hogar».
Deja una respuesta