Él me habla de ti,
de cuando estabas vivo:
me habla de tus bromas,
de tus palabras inventadas,
de tus locuras,
de tus gestos,
y de tu sonrisa torcida.
Me habla de tu ausencia
en sus miradas perdidas,
en sus interminables silencios
en su tristeza amarga,
en las lágrimas que se guarda,
y en la ira que le atenaza,
por tu vida truncada.
Y te siento…
Te siento dentro en cada recuerdo
que ahora también es mío,
en cada vacío que nos rodea
y que no hay palabras
en ningún idioma
que pueda describirlo.
Lamento con un dolor inmenso
no haberte conocido,
porque así como él te ama,
sé certera que te hubiera amado
con la misma intensidad
que la añoranza demoledora
que tu ausencia todo lo embarga…
Poema de Sara de Miguel y fotografía de Tomeu Mir
En memoria de Miquel Mir.
Deja una respuesta